EL NARCOTRAFICANTE DEL TERROR

El guion te muestra que Pablo Escobar era un hombre que lo tenía todo bien organizado y planificado, sin dejar cabos sueltos; por miedo a que le quieten lo que es “suyo” y la seguridad de que no lo hagan. La introducción te presenta a Pablo Escobar (Benicio del Toro) justo la noche antes de ingresar en prisión, si le afecta o no y si es así cuánto. Te muestra de forma visualmente clara que es un hombre religioso. Luego hace que conozcas a los otros dos protagonistas que se verán involucrados en la trama de la película. El guion usa un salto temporal para que entiendas lo que y como ha pasado  y como han llegado los personajes a la situación que te muestran al inicio. Ha creado a la única persona que no sabe quién es Pablo Escobar. Más hoy en dia que no hay nadie que no sepa quién era Pablo Escobar, y los que no lo sabían,  ya lo saben gracias a la serie: Narcos. El guion sin querer ha hecho a Nick (Josh Hutcherson) uno de los personajes más incultos, entre otras cosas por no saber quién es Pablo Escobar. Divide la historia en capítulos separados por fundidos y cortes a negro. A la hora de film llegas al punto de partida que te presentaron con un flashforward al principio. Es demasiado evidente que es un Thriller en toda regla. El guion posee secuencias muy duras. Tiene un final muy representativo y metafórico, que para entenderlo bien tienes que acordarte lo que le ha pasado al personaje que acompaña a Nick en la última secuencia (lo digo así para no destrozarle a nadie el final).

La película tiene dos actores españoles de peso y muy conocidos en el cine español: Benicio del Toro y Carlos Bardem. La interpretación de Benicio del Toro es demasiado previsible, porque siempre hace el mismo estilo de personajes: oscuros, malos, misteriosos, delincuentes y/o  relacionados con el mundo de las drogas de algún modo u otro; y es una actor que necesita más variedad a nivel interpretativo y cambiar de género, por ejemplo no le iría nada mal irse al otro extremo y hacer una comedia. En cambio la interpretación de Brady Corbet es tan exagerada, que incluso llega a ser molesta; porque se nota que esta sobreactuando, no le sale de forma natural forzándolo todo; con esto lo único que consigue es apartar al espectador de la película.

Andrea Di Santo te demuestra lo bien que se le daba fingir y amenazar sin decir gran cosa a Pablo Escobar; además de mentir muy bien e intimidar y hablar de la muerte como quien habla del tiempo. Te cuenta cuales eran sus tapaderas. Puede ser muy peligroso entrar en un sitio sin saber con quién estas. No puedes pretender salir con la sobrina de Pablo Escobar y llevar una vida normal. A veces tenemos que tomar decisiones y hacer cosas muy duras que no nos gustan. Algunos individuos te obligan de todas las formas posibles (pero sobretodo jugando con el miedo) a hacer cosas en contra tu voluntad. Nunca te fíes de un delincuente (una persona que tiene negocios ilegales). No hay mejor escondite que a plena vista. Ves que Pablo Escobar era inhumano. Donde las dan las toman, tócale la familia a un buen hombre y estarás muerto. El Kharma existe: todo el daño que hayas causado voluntariamente, tarde o temprano, se volverá en tu contra (en la vida real Pablo Escobar fue asesinado por un bloque de búsqueda los cuales luego se tomaron una foto con el cadáver de Pablo Escobar); a veces el Kharma usa a personas para hacer su trabajo. Dios no te salvara de ir al infierno, por mucho que reces siendo un hombre tan malvado; el perdón no se puede comprar. Andrea Di Santo usa imágenes como metáforas de lo que está ocurriendo o lo que está por venir. Usa el plano subjetivo  para que entiendas la tensión que está sufriendo un personaje en concreto y logres empatizar con él. Las transiciones que usa Andrea Di Santo para cambiar de escena, son bastante bruscas y ruidosas; pero está hecho para que la tensión aumente. Algunos planos que ha elegido hacen que el film parezca un falso documental.

                                                              Nacho Miret Vives