OTRA MÁS

 

What man want es un film con un guion plagiado, poco original, cómico, machista, masculino, versionado, curioso, burlesco, casi paródico y nada innovador. Recurre al humor chorra o absurdo (es lo mismo): Básicamente consiste en hacer reír mediante chorradas y/o cosas absurdas; normalmente demasiado simples y cuotidianas. Posee ciertos gags, solamente un poco divertidos, porque se basan únicamente en la humillación pública de alguien. Se puede apreciar con demasiada claridad el característico humor de Tracey Morgan. Algunos chistes, tienen gracia, porque es una broma referente a la persona que lo dice y su mentalidad; únicamente funcionan si lo dicen ellos mismo; es el punto fuere del sketch. La introducción te presenta de forma sincera, directa, detallada, cómica, personal y concisa a Ali Davis (Taraji P. Henson), para que veas: como se gana la vida, su comportamiento habitual, carácter, personalidad, mentalidad y estilo de vida. También te deja demasiado claro, el tipo de película que será y cuál es el género dominante. La situación se va poniendo progresivamente un poco más atrayente, según va avanzando el relato. Poco a poco vas viendo la similitud (es exactamente idéntica) a What women want (Nancy Meyers, 2000). Últimamente, están haciendo versiones femeninas de todos los clásicos; además, ya llevan dos fracasos: Ocean’s 8 (Gary Ross, 2018) y Ghostbusters (Paul Faig, 2016). Si ya has visto What women want, ya sabes cómo va acabar de antemano esta versión; porque la única diferencia es que la han actualizado (la distinta época en la que las han rodado) y que está es una versión femenina. El guion se apoya mucho en la dirección: en What women want, se necesitaba la perspectiva de una mujer así que la dirigió Nancy Meyers, pues bien, en está ocasión se necesitaba el punto de vista de un hombre, así que han contratado a Adam Shankman. Ciertos detalles del guion son demasiado predecibles. El interés respecto a ciertas cosas que se genera, va aumentando exponencialmente. El guion va cogiendo un tono moralista, cada vez mayor, a medida que transcurre el relato. Como era de esperar las cosas se tuercen. Usa la voz en off, para reflejar la culpabilidad y el atormento de la protagonista. Tiene un final feliz, reconciliador, antimachista, aleccionador, amistoso, romántico, evolutivo, prospero, cómico, divertido, Kharmico, vengativo, profesional, moralista, sincero, directo y familiar.   

Como de costumbre, han vuelto a traducir de forma incorrecta el título. En la versión original se titula: What man want, que traducido significa: Que quieren los hombres; pero en vez de eso y respetarlo, han decidido pasárselo por el forro y llamarla: ¿En que piensan los hombres?. Con esto simplemente lo único que consiguen es faltarle al respeto al trabajo del director y los guionistas por encontrar un título con el suficiente gancho, gracia, sentido y significado para resumir toda la película en pocas palabras sin desvelar nada y atraer al público. Se toman libertades innecesarias y asignan responsabilidades que no les corresponden. Si quieres traducir el título, antes de meter la pata hasta el fondo, déjalo como esta, no lo traduzcas, no sería la primera vez que se hace: Taxi Driver, Tropic Thunder, Iron Man, Shame, Hancock, Cowboys & Aliens, Need for speed, Minority Report, Paul, Dallas Buyers Club, The Interview, Big Fish, Joy, Captain Fantastic, Prometheus, Alien Covenant, Up in the air, Don Verdean, Slumdog Millionare, Independece Day, Philadelphia, The Skeleton Twins, Warrior, Crazy Stupid Love y podría pasarme así durante días. 

El film te transmite el mensaje de que las casualidades no existen: todo ocurre por una misteriosa, curiosa, extraña y desconocida razón en particular. El Kharma es tan real como el aire que respiramos: tarde o temprano recoges lo que siembras; el Kharma castiga y el Dharma recompensa. Los machistas solo son individuos chapados a la antigua, tan atrapados en el pasado y de mente cerrada, que de lo cavernícolas que son, son incapaces de vivir el presente, entender y respetar que la mujer es igual o mejor que el hombre. Desgraciadamente, existen empresas en las que el machismo está a la orden del día, por lo tanto, vergonzosamente es un mundo de hombres. En ciertos trabajos, se requiere, un nivel de agresividad comercial muy alto, nunca aceptar un no como respuesta y ser demasiado avispado, socialmente hablando. En los negocios, muchas veces, hay que poner las cartas sobre la mesa y plantar cara. La gran mayoría de personas, ocultan como se sienten en realidad, para no parecer débiles, entre otras muchas razones. En ciertas ocasiones, se te dan dones que al principio no entiendes el porqué, pero después, te dan la capacidad de comerte el mundo si te apetece, si las utilizas bien y para algo bueno. La gente está llena de sorpresas. Todos tenemos secretos, algunos peores que el de otros. A veces uno/a debe dejarse ganar para conseguir algo mucho mejor. La vida te da oportunidades únicas, demasiadas pocas veces, así que aprovéchalas bien cuando te las dé. En ciertos lugares, es de vital importancia, saber trabajar en equipo. En el Universo, hay cosas mucho más importantes que el éxito profesional y ganar. Hay que ser un poco egoísta; pero no demasiado, porque si te pasas de egoísmo, alejaras a todo el mundo de ti y te quedarás más solo/a que un tirano en la cima. Poder leer la mente no significa que sepas realmente lo que quiere una persona, pero ayuda. Algunas experiencias, te hacen crecer como persona y ser la mejor versión de ti mismo/a. Se debe escuchar con el corazón, no con los oidos (a las personas que te importan).

 

Adam Shankman utiliza el travelling, para ocultar un corte (aunque se ve) e intentar lograr un cambio de secuencia perfecto, con un clásico del montaje: tapar la cámara con un objeto del set de rodaje. El Jump Cut, para realzar algo y darle aún más valor del que ya tiene y a la vez ahorrar tiempo.

ASÍ ES COMO YO VEO WHAT MAN WANT (UNA MEZCLA DE LAS DOS):

     

MAKING OFF WHAT MAN WANT:

        Nacho Miret