MATRIMONIO - CRÍTICA BAJO EL MISMO TECHO
Bajo el mismo techo
es un film con un guion “paródico”, sincero, directo, burlesco, previsible,
típico, divertido, cómico, gracioso, “familiar”, curioso y que refleja una
realidad matrimonial, pero de manera distinta al que pensamos. Recurre al humor
chorra o absurdo (es lo mismo): Básicamente, consiste en hacer reír mediante
chorradas y/o cosas absurdas; normalmente demasiado simple y cuotidianas, pero
con un enfoque mucho más divertido. Posee los típicos chistes de casados;
algunos son visuales, es decir, que, si no prestas atención, no verás el gag. Van cogiendo exponencialmente más fuerza,
siendo más efectivos, evidentes y tópicos. Tiene algunos sketches graciosos,
porque el principal objetivo del gag es: hacer el ridículo. Utiliza el humor
picante, para intentar provocar la risa: Únicamente se trata de hacer reír a
través de bromas y chistes relacionados con el sexo: juegos de palabras, dobles
sentidos, malos entendidos, imágenes explícitas, etc. La introducción te
presenta de forma cómica, simultánea, paralela, divertida, sincera, personal,
insinuante y concisa a Adrián (Jordi Sánchez) y Nadia (Silvia Abril); para que
veas el comportamiento habitual, carácter, personalidad, mentalidad y estilo de
vida de cada uno de ellos, y así puedas apreciar con mejor claridad, lo diferentes
que son entre sí. También te deja demasiado claro el tipo de película que será
y cuál es su género dominante. Ciertos detalles del guion son demasiado
predecibles. Justo después de la presentación, hace un salto temporal hacia
delante, para mostrarte la cruda realidad de las cosas y lo que han cambiado. El
guion está separado por capítulos mediante unos títulos de por medio (una
decisión reforzada por la dirección). La situación se pone progresivamente más
“interesante”, a medida que el relato se desarrolla. Es un guion equitativo, es
decir, las circunstancias empeoran para ambos personajes protagonistas, no solo
para uno; lo cual es de agradecer, porque de no ser así, te cansarías, le
cogerías, manía a uno de los personajes, estropearía el film y te darían ganas
de dejar de verlo. Logra que empatices muy fácilmente con Adrián Pozo. Te avisa
inconscientemente de lo que sucederá más adelante. Tiene un final feliz, amistoso,
futurista, cómico, divertido, un poco gracioso, predecible, reconciliador,
sincero, directo, pacificador, próspero y evolutivo.
La interpretación de
Jordi Sánchez es impecable, magnífica, agradecida, auténtica y que ayuda a que
todo el engranaje que hace que su personaje se mueva, funcione perfectamente.
Las interpretaciones de este tipo, son muy favorables para los guiones, porque
ayudan a que el espectador se sumerja de lleno en el relato que te están
contando, empatice con todos y cada uno de los que aparecen en la historia que
explican, incluyendo el suyo y todo fluya mucho mejor. Es decir, que este nivel
interpretativo que tiene Jordi Sánchez, es muy necesario en determinadas
películas en concreto, porque son las que hacen que el guion funciona mejor,
tenga más fuerza y eficacia en el espectador.
Hay un pequeño detalle,
casi imperceptible, que, si no te fijas bien, prestas la suficiente atención,
eres observado, miras en la dirección y momento adecuado, no lo verás y lo
pasarás absolutamente por alto: Se nota demasiado el Photoshop de las fotos. Algo
que verás con más claridad y facilidad si usas mucho y muy a menudo Photoshop.
La película te transmite
el mensaje de que se pueden tener ideas totalmente distintas de la decoración
de un lugar, las cuales pueden causar un pequeño conflicto. El que avisa no es
traidor. Vigila siempre a los tiburones empresariales, pueden tragarte y
escupirte en cuestión de segundos. La verdad tarde o temprano acaba saliendo a
la luz. Algunos matrimonios pasan por ciertas etapas y hacen cosas
perjudiciales inevitablemente. Las cosas hay que cuidarlas, porque si las
descuidas, lo puedes perder todo de la noche a la mañana. Cuando hay algo
valioso de por medio y es por una causa justa, todo vale. Donde las dan las
toman. Hay guerras, en las que no puedes achantarte, debes plantar cara y
demostrar quién manda. Existen situaciones, en las que no se pueden hacer
bromas, porque la persona está pasando por un mal momento. En este Universo hay
gente que interpone su negocio (éxito profesional) a la amistad, sin
importarles el daño que causen. Si conoces los puntos débiles de tu rival, la
venganza puede ser muy dulce.
Juana Macías utiliza el primer plano, para transmitirte un mensaje
demasiado claro y visible. Se apoya mucho en la imagen para darle cierta
información al espectador. Con el zoom in, realza una reacción y le otorga más
importancia, centrando la atención del espectador en lo que te está enseñando.
Nacho Stars: 4, 56
Nacho Miret
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