VIEJAS GLORIAS PELIGROSAS - CRÍTICA EL CUENTO DE LAS COMADREJAS


El cuento de las comadrejas es un film con un guion sincero, directo, atractivo, atrapante, peculiar, curioso, artístico, rememorativo, criminal, humorístico y detectivesco. Prácticamente, todo el guion está repleto de humor negro, algunas veces de un modo evidente y otras de manera sutil. La introducción te presenta de forma concisa artística, personal, musical, sincera, directa, atrayente y pasional a Mara Ordaz (Graciela Borges) junto con toda su tropa de amigos, y así puedas conocer el comportamiento habitual, carácter, personalidad, mentalidad y estilo de vida de cada uno de ellos. También te deja demasiado claro el tipo de película que será y cuál es su género dominante. Resalta a ciertos personajes, con ayuda de la imagen y la banda sonora. Es un guion de doble capa, es decir, Martin Saravia (Marcos Mundstock), el guionista del grupo, te explica, indirectamente, qué clase de guion es y cómo funciona (lo analiza), el del film que estás viendo. Poco a poco, empiezas a sospechar que Bárbara Otamendi (Clara Lago) y Francisco Gourmand (Nicolás Francella) son unos embaucadores que solo quieren quitarle la casa a Mara Ordaz, tirarla al suelo y edificar un complejo. Más tarde, se descubre todo el pastel y se confirma que realmente sí que son unos farsantes que mienten más que hablan (los antagonistas). La situación se va enturbiando gradualmente. Al parecer, Francisco engaña a Mara para quitarle la casa, y Bárbara engaña a Francisco para ser la dueña del negocio. Con el fundido a negro, separa el relato sé diferentes capítulos. Las circunstancias se van poniendo progresivamente más interesantes. La tensión e intensidad, va en aumento escalonadamente. Cuando ves el plan para derrotar a Bárbara y Francisco, resulta brillante y muy ingenioso. La situación se va complicando exponencialmente. Tiene un final feliz, reconciliador, vengativo, Kharmico, justiciero, intenso, divertido, aleccionador, ingenioso, revelador y amistoso para cuatro personajes. 

La interpretación de Oscar Martínez y Luis Brandoni es impecable, magnífica, agradecida, auténtica y que ayuda a que todo el engranaje que hace que su personaje se mueva, funcione perfectamente. Las interpretaciones de este tipo, son muy favorables para los guiones, porque ayudan a que el espectador se sumerja de lleno en el relato que te están contando, empatice con todos y cada uno de los que aparecen en la historia que explican, incluyendo el suyo y todo fluya mucho mejor. Es decir, que este nivel interpretativo que tienen Oscar Martínez y Luis Brandoni, es muy necesario en determinadas películas en concreto, porque son las que hacen que el guion funciona mejor, tenga más fuerza y eficacia en el espectador.

Hay un fallo de raccord: Cuando Graciela Borges entra en la casa y se apoya en el podio donde está el Oscar, justo en la entrada; al cambiar de plano, se vuelve a acercar y apoyarse; es el mismo caso del famoso Rayo que cae dos veces en Matrix (The Wachowski Brothers, 1999). Pues ella está quieta apoyada en el podio, y en el siguiente plano, sin haberse movido previamente, vuelve a estas detrás acercándose al podio.

La película te transmite el mensaje de que el Kharma no existe: tarde o temprano recoger lo que siembras; el Kharma castiga y el Dharma recompensa. Si te metes con la persona equivocada, lo puedes acabar pagando demasiado caro. Si conoces los puntos débiles de tu adversario, sabrás por donde atacar y será mucho más fácil vencerlos. Algunas personas viven atrapadas en el pasado, y al mismo tiempo necesitan constantemente halagos, para reafirmar su ego e imagen. Hay gente que miente por alguna razón u otra. Siempre habrá individuos que se burlen de ti, algunas ocasiones en bromas y otras no. Los verdaderos estrategas son auténticos genios, que nunca los ves venir, ni sabes que son buenos estrategas, a menos que ellos te lo digan. Para vencer a un duro enemigo, hay que ser más listo y jugar con él /ella. La verdad tarde o temprano acaba saliendo a la luz. Todos tenemos secretos, algunos peores que los de otros. Se pilla antes a un mentiroso que a un cojo. 

Juan Jose Campanella utiliza determinados planos, para darle más importancia a algunas cosas, personas y de un modo necesario. Con el plano holandés, aporta la diferencia requerida y un cierto atractivo y valor estético.


Nacho Stars: 7,50





Nacho Miret





 

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