Ocean’s 8
es un film con un guión plagiado de los pies a la cabeza, predecible, poco
original, lineal, que deja que desear, que lo único sorprendente es la cantidad
definitiva de dinero que roban (porque todo lo que sospechas se cumple) e
interesante pero solo para ver hasta donde se han copiado de la famosa trilogía
de Steven Soderbergh. La introducción te presenta de forma idéntica hasta el
más mínimo detalle a Ocean’s Eleven (Steven
Soderbergh, 2001) a Debbie Ocean (Sandra Bullock), la supuesta hermana de Danny
Ocean (George Clooney) (digo supuesta porque en la trilogía nunca se mencionó
una hermana, porque no la había). Ya des del principio matan a Danny Ocean; algo
que es un enorme y terrible error porque no tiene ningún sentido (en Ocean’s Thirteen (Steven Soderbergh,
2007) se le ve vivito y coleando, sin ningún problema que atente contra su seguridad,
¿así que porque tendría que estar muerto o siquiera fingir su muerte?, no hay
respuesta porque no hay ningún motivo). Además, con este inicio te deja
entender que será un caso parecido al de la versión femenina de los Ghostbusters. Es demasiado evidente que
el comienzo de la película está calcado al cien por cien, pero modernizado de Ocean’s Eleven; tanto que duele y te
demuestra la originalidad del guión. Según va avanzando te va quedando más
clara y dando cuenta, que está historia que te están contando, simplemente es
un relato creado para aprovecharse de la fama de las tres películas de Ocean’s.
Poco a poco vas descubriendo, que al parecer Debbie Ocean es una especie de
cleptómana, a la cual se le da muy bien mentir y tiene mucha labia; a parte de
saber siempre donde ponerse, cuando y como. Para intentar justificar algunos
detalles y dar excusas, de que es diferente pero la misma historia, el guión
recurre al cameo de Reuben (Elliott Gould); pero fallan el tiro y consiguen lo
contrario de lo que pretendían. Y hablando de cameos el de James Corden se coge
por los pelos, perfectamente podrían haber elegido a otro actor, solo le han
elegido a él por quien es. Incluso tiene diálogos escritos de la misma forma
que en la trilogía de Ocean’s (en
particular las secuencia de Ocean’s
Eleven en la que Danny y Rusty (Brad Pitt) discuten por Tess (Julia
Roberts)). Si has visto la trilogía Ocean’s,
ya tienes suficiente, porque esto es idénticamente los mismo, pero con mujeres;
es la versión feminista de Ocean’s
Eleven. Tiene secuencias copiadas con exactitud de Ocean’s Twelve (Steven Soderbergh, 2004). Es una burda imitación de
la trilogía Ocean’s, y todo el rato
hace lo mismo; copiando de alguna manera u otra. Según va avanzando la
historia, vas conociendo los miembros integrantes de la banda de Debbie Ocean;
exactamente de la misma manera que en Ocean’s
Eleven. El guión toca muchos estereotipos clásicos sociales: Los neega, los
rastafaris, las amas de casa, las mujeres hackers, las pijas, las mujeres
masculinas, las adolescentes que siempre están con el móvil y son skaters, etc…Mediante
el flashback te explica partes del pasado de algunos de los personajes. Ciertos
detalles del guión son muy previsibles. Está claro que Lou (Cate Blanchet) es Rusty.
El punto fuerte del guión de la trilogía de Ocean’s,
es el factor sorpresa y la puesta en escena ocultando información para
revelarla al final; en Ocean’s 8, lo
han querido imitar, pero no lo han conseguido; se lo han cargado, porque lo ves
todo, sutilmente, pero siendo muy visible e indiscutible, y no ocultan
información como hacen en la trilogía. Tiene un final feliz, previsible y que
confirma el error del principio relacionado con Danny Ocean.
Aunque Sandra Bullock es
una buena actriz, en esta ocasión su interpretación totalmente plana,
insustancial, fría, floja y que no te transmite nada en absoluto; es como una
especie de robot. Verla a ella actuar es como ver a un tempano de hielo. No es
que sea mala actriz, simplemente es que se queda a medio camino interpretando y
recurre siempre a su belleza y sensualidad, para despistar al espectador de
este fallo que tiene la actriz a nivel interpretativo; hasta que sea demasiado
tarde y dicho error de actuación sea tan grande que ya no se pueda corregir.
Hay un pequeño detalle,
que si no te fijas bien, prestas la suficiente atención y no has visto la
trilogía entera de Ocean’s, no lo
verás y lo pasarás completamente por alto, porque es casi imperceptible, a no
ser que tengas buen oído musical y memoria: La banda sonora del film, es una
clara mezcla y reedición de la verdadera banda sonora de la trilogía de Ocean’s.
La película transmite el
mensaje de que el Kharma existe: recoges lo que siembras; el Kharma castiga y
el Dharma recompensa. Dios los cría y ellos se juntan. Las mujeres son iguales
o mejores que los hombres. Hay que hacer caso a los expertos, porque saben de
lo que hablan. La venganza es un plato que se sirve frio y que sienta muy bien.
Hay personas que son tan transparentes, que resultan fáciles de manipular;
sobretodo, las que el ego y la vanidad va ligada a la autoestima. El ingenio y
mucho tiempo a veces lo es todo para poder pasar página. Nunca subestimes a una
persona. A veces la indiferencia, es la mejor baza para conquistar a alguien;
normalmente gente acostumbrada a que les vayan detrás constantemente.
Para acabar de rematar la poca originalidad que hay en el guión, Gary
Ross utiliza el mismo tipo de planos que se usaron en la trilogía Ocean’s, copiando el guión técnico.
Nacho Miret
No hay comentarios:
Publicar un comentario