DEMASIADO PREVISIBLE

Get Hard es un film con un guion clasicista, atrapante, cómico, divertido, bastante absurdo, paródico, criminal, burdo y burlesco. Recurre al humor chorra o absurdo (es lo mismo): Únicamente se trata de hacer reír a través de chorrada y/o cosas absurdas; normalmente demasiado simple y cuotidianas. Se puede apreciar claramente el humor tan típico de Kevin Hart. Tiene ciertos chistes, sutilmente graciosos, porque mediante el sarcasmo, se burla por ejemplo del sistema judicial, descaradamente. Posee el típico humor racista casi inofensivo (digo casi porque le falta muy poco, para llegar a ser ofensivo). Las circunstancias se vuelven tan surrealistas, que resultan hasta graciosas. Tiene ciertos gags graciosos, porque juega con los dobles sentidos y los malos entendidos (sexualmente hablando). Recurre al humor picante intermitentemente: Básicamente, consiste en hacer bromas sexuales (malos entendidos, dobles sentidos, juegos de palabras, imágenes explicitas, etc…). Algunos comentarios son graciosos, porque expresan una realidad, verdad, opinión y pensamiento. Ciertos detalles del guion son demasiado predecibles. La introducción te presenta de forma insinuante, personal, concisa y detallada a James Keen (Will Ferrell) a través de un flashback, para que conozcas su situación; acto seguido de la misma manera (pero sin el salto temporal) conoces a Darnell (Kevin Hart). Para que puedas saber quiénes son los protagonistas de esta historia que te contaran, y ver el comportamiento habitual, carácter, personalidad, mentalidad y estilo de vida de ambos. También te deja demasiado claro el tipo de película que será y cuál es su género dominante. Te muestra con bastante claridad (dividiéndolo eficazmente) las dos clases sociales más típicas que hay: Alta (ricos) y Baja (pobres). El guion es demasiado transparente a la hora de presentar a los personajes; por ejemplo: es más que evidente que James Keen es un calzonazos, ingenuo, confiado e inocente. Todos los personajes interpretados por Will Ferrell, parecen ser creado estrictamente para él; porque son todos prácticamente iguales. De golpe, las circunstancias para James Keen, cambian radialmente, complicándose exponencialmente. Después de contar toda la parte principal de la trama, volvemos al punto de partida, que es la primera imagen que se ha visto al principio del relato (la imagen inaugural). Una parte de la situación se va poniendo más interesante progresivamente, mientras que la otra emocionante. Posee ciertas secuencias trepidantes, que provocan pequeños subidones de adrenalina. Tiene un final feliz, reconciliador, Kharmico, aleccionador, amistoso, moralista, evolutivo, amistoso, familiar, prospero, divertido y en cierto modo previsible.

La interpretación de Kevin Hart es agradecida, auténtica y que ayuda a que todo el engranaje que hace que su personaje se mueva, funcione perfectamente. Las interpretaciones de este tipo, son muy favorables para los guiones, porque ayudan a que el espectador se sumerja de lleno en el relato que te están contando, empatice con todos y cada uno de los que aparecen en la historia que explican, incluyendo el suyo y todo fluya mucho mejor. Es decir, que este nivel interpretativo que tienen Kevin Hart, es muy necesario en determinadas películas en concreto, porque son las que hacen que el guión funciona mejor, tenga más fuerza y eficacia en el espectador. Mientras que Will Ferrell solamente aporta su clásico humor infantiloide y sobreactuado en plan burlesco, como siempre.

El film te transmite el mensaje de que el Kharma existe: tarde o temprano recoges lo que siembras; el Kharma castiga y el Dharma recompensa. Con los amigos de verdad, es necesario ser sincero. Hay experiencias que te harán evolucionar como persona. Te puedes acabar haciendo amigo/a de quien menos te esperas. Existen varias maneras diferentes, de hacer las cosas. Todo lo malo tiene su lado bueno. Si te preparas para lo peor, luego podrás afrontar cualquier problema; porque te has preparado para el peor de los casos. Todo el mundo tiene secretos, algunos peores que el de otros. El ansia de poder, puede corromper a cualquiera, y hace jugar sucio; por lo tanto, debes decidir si ser bueno o no. Cuando más se tiene más se quiere. Los malos siempre juegan sucio. Hay personas tan vanidosas, que lo único que les importa y les mueve es la imagen (el dinero va ligado). Por desgracia, existen individuos, que se aprovechan de la gente más ingenua y confiadas, sin importarles las consecuencias. Algunas personas son más astutas de lo que parecen. Siempre que un rico roba, se libra de la cárcel, pero si lo hace un pobre, en cuestión de segundos está en la peor prisión que hay y con la máxima condena. Algunos individuos son tan materialistas, que solo se mueven por interés económico y soberbia. Los tiburones de Wall Street y otras compañías de este tipo, se les llama de este modo, porque no se detienen ante nada, ni nadie. Si quieren algo lo cogen sin más, sin preocuparles si es legal o no, del daño que puedan causar o las repercusiones que pueda tener (suelen ser narcisistas también); después inculpan a alguien lo suficientemente ingenuo para salirse con la suya.

Etan Cohen utiliza secuencias cortas (rozando el Jump Cut), junto con planos picados y contrapicados, para aportar más dramatismo y dinamismo a una circunstancia.

                                                                      Nacho Miret