JUSTICIEROS


Acts of violence es un film con un guión atrapante, seductor, previsible, intenso, trepidante, vengativo, sincero, directo y Kharmico. La introducción te presenta a los cuatro personajes principales, entorno a los cuales va a girar toda la trama del guión; viendo el comportamiento habitual, carácter, personalidad, mentalidad y estilo de vida de cada uno de ellos, de forma absolutamente eficaz; establece los roles de cada uno de los miembros de la familia. Te insinúa sutilmente, que estos cuatro personajes, más tarde, se convertirán (como he mencionado anteriormente) en los protagonistas de la historia que te están a punto de empezar a contar. Te deja bien claro el tipo de film que será y cuál es su género dominante. Después de presentarte a los protagonistas para que el espectador se centre en lo que de verdad importa, hace un salto de quince años hacia delante, para pasar a una de las partes realmente importantes del relato que te están explicando. Usa la voz, para acabar de meterte más en la situación y entenderla mejor; aunque el dialogo sea filosófico, casi poético. Las circunstancias se ponen trepidantes en pocos segundos, de manera bastante fácil; de la misma forma que van siendo progresivamente más emocionantes e interesantes. Tiene un par de chistes breves, muy eficaces, porque reflejan una realidad, pero con un enfoque más divertido. El guión es una crítica social a lo mal que funciona la ley. Cada vez resulta más evidente la clase de guión que es: uno de venganza y tomarse la justicia por su propia mano (justicieros). Tiene un ambiente oscuro y frío, que te mete más en el relato que te están narrando. Ciertos detalles del guión son demasiado predecibles, casi milimétrica y cronométricamente. Te cuenta dos historias obviamente relacionadas entre sí, simultánea y paralelamente, para que sigas más de cerca el relato y no te pierdas nada. El deseo de que los malos empiecen a morir uno tras otro va en aumento, hasta llegar al nivel de ser incontrolable e irrefrenable. Te muestra al antagonista como un auténtico desalmado, demasiado malvado para tener escrúpulos y muy escurridizo. Te deja ver que el fuego se combate con fuego; es la única manera. Parece que sea una norma general: en prácticamente todos los guiones en los que aparecen justicieros como protagonistas, el tema principal es: los malos ejercen: trata de blancas y/o prostitución forzada; en los otros casos son traficantes de armas. La angustia va creciendo exponencialmente. La situación se va complicando más según va transcurriendo el relato. El guión te enseña dos muertes inesperadas muy trágicas, que te afectan. Tiene un final relativamente feliz, reconciliador, Kharmico, sincero, familiar, revelador, amistoso, directo y con una parte dramática antes del cierre de la historia.

La interpretación de Cole Hauser es impecable, magnífica, agradecida, auténtica y que ayuda a que todo el engranaje que hace que su personaje se mueva, funcione perfectamente. Las interpretaciones de este tipo, son muy favorables para los guiones, porque ayudan a que el espectador se sumerja de lleno en el relato que te están contando, empatice con todos y cada uno de los que aparecen en la historia que explican, incluyendo el suyo y todo fluya mucho mejor. Es decir, que este nivel interpretativo que tiene Cole Hauser, es muy necesario en determinadas películas en concreto, porque son las que hacen que el guión funciona mejor, tenga más fuerza y eficacia en el espectador.

La película te transmite el mensaje de que el Kharma existe: recoges lo que siembras (tarde o temprano); el Kharma castiga y el Dharma recompensa. Siempre hay alguien dispuesto a ayudar a los débiles, indefensos y/o más necesitados. Nunca le toques lo más sagrado para un hombre, porque te estás pintando una diana, y será lo último que hagas, convirtiéndote en un hombre muerto. Nunca cabrees a la persona equivocada. A veces uno tiene que hacer cosas a espaldas de la ley, por culpa de protocolos, restricciones, leyes, normas y vacíos legales; por eso en ciertas ocasiones los justicieros son necesarios. Nunca empieces una guerra que no puedes ganar. A la chusma que trata mal a la gente, hace cosas ilegales e inmorales, hay que hablarles, en el único lenguaje que entienden: La violencia y el miedo. Por desgracia, en el mundo hay individuos que tratan a las personas como objetos de los que puede lucrarse, sacando un beneficio personal; pero gracias a Dios, siempre habrá, alguien dispuesto a saltarse la ley para castigarles con la muerte y el dolor. Perro ladrador poco mordedor: hay individuos que se les va la fuerza por la boca y a la hora de la verdad son unos auténticos cobardes lloricas.

Brett Donowho utiliza el travelling y la panorámica, para mostrarte la conexión que hay entre dos personajes e insinuarte demasiado claramente, algo que sucederá.









                                                                      Nacho Miret









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