LEÑADORES Y NARCOS


Braven es un film con un guión previsible, criminal, de acción, un poco interesante y demasiado típico, porque tiene una historia que ya se ha inventado y se ha visto mil veces. La introducción te presenta a Joe Braven (Jason Momoa, más conocido como el Aquaman samoano), en su trabajo y después en un entorno familiar feliz, para que conozcas: su familia, comportamiento habitual, carácter, personalidad, estilo de vida y mentalidad. Cuando conoces a Linden Braven (Stephen Lang), el padre de Joe Braven, intuyes inevitablemente por la forma tan indiscutible de presentártelo, que algo le pasa (pérdidas de memoria o algo por el estilo). Poco a poco se va desvelando que en realidad, si tiene problemas mentales (más concretamente una enfermedad), que se originaron en un accidente que tuvo en su pasado; todo esto se confirma cuando Joe y su familia visitan el hospital por culpa de un altercado en el que se ha visto involucrado Linden. Justo después empiezas a sospechar que tiene Alzheimer, porque te lo dice sin decirte el nombre de la enfermedad que tiene. El guión tiene algunos diálogos que confunden durante un instante, respecto a la relación entre dos o varios personajes. Son de esos diálogos (palabras) que necesitan una breve explicación, porque son incomprensibles a no ser que tengas la información necesaria, para entenderlo sin la explicación adecuada. Ciertos detalles del guión son tan típicos de esta clase de historias, que cuando los descubres se convierten en predecibles. Cuando llegas a los veinte minutos de la película, todo lo demás se hace demasiado previsible de algún modo u otro (incluido el final). Como era de esperar, la situación se complica en pocos minutos, tras un suceso que se sabía que iba a pasar. El único punto fuerte de este guión son Jason Momoa y Stephen Lang, si no fuera por ellos, sería la clásica TV Movie de siempre que hacen a la tarde justo después de comer casi a la hora de merendar. Al presentarte a Kassen (Garret Dillahunt), te dice, que aparte de ser un narcotraficante, es una especie de sociópata en potencia de gatillo fácil. Tiene un detalle muy concreto, que no tiene ningún sentido en absoluto: en la radio que conecta Joe Braven, se oye claramente que tiene señal, le oyen y él también, y “hacer ver” que no (¿de repente se vuelve sordo?). De golpe y sin previo aviso, las circunstancias se ponen emocionantes. Este guión está dividido en dos partes: la primera que es la floja y la segunda: la predecible pero mejor que la primera. Posee un trágico acontecimiento, que lo “único” que hace es enfurecer más a Joe Braven. El guión pone a Jason Momoa, en una situación, que después de rodar Justicie League (Zack Snyder, 2017), te hace ver, a Aquaman en vez de a Joe Braven: está en el agua, sin camiseta, solo con unos tejanos muy parecidos a los que lleva Arthur Curry y unas botas. La forma de vencer y matar a Kassen es absolutamente inesperada, pero completamente creativa, única y masoca; además se veía venir des del principio que acabaría muerto. Tiene un final feliz, familiar, reconciliador, previsible, Kharmico, romántico y vengativo.

Como de costumbre, han vuelto a traducir de forma incorrecta el título. En la versión original se titula: Braven, que traducido significa: Valiente (pero en este caso es el apellido del protagonista); pero en vez de eso y respetarlo, han decidido pasárselo por el forro y llamarla: El Leñador. Con esto simplemente lo único que consiguen es faltarle al respeto al trabajo del director y los guionistas por encontrar un título con el suficiente gancho, gracia, sentido y significado para resumir toda la película en pocas palabras sin desvelar nada y atraer al público. Se toman libertades innecesarias y asignan responsabilidades que no les corresponden. Si quieres traducir el título, antes de meter la pata hasta el fondo, déjalo como esta, no lo traduzcas, no sería la primera vez que se hace: Taxi Driver, Tropic Thunder, Iron Man, Shame, Hancock, Cowboys & Aliens, Need for speed, Minority Report, Paul, Dallas Buyers Club, The Interview, Big Fish, Joy, Captain Fantastic, Prometheus, Alien Covenant, Up in the air, Don Verdean, Slumdog Millionare, Independece Day, Philadelphia, The Skeleton Twins, Warrior, Crazy Stupid Love y podría pasarme así durante días.

El film te transmite el mensaje de que las casualidades no existen: todo ocurre por un misterioso, curioso, extraño y desconocido motivo en concreto. El Kharma es tan real como el aire que respiramos: recoges lo que siembras; el Kharma castiga y el Dharma recompensa; pero a algunas veces es necesario llenar el cupo para que el castigo sea proporcional al delito. Nunca toques la familia de un buen hombre, es lo más sagrado de todo el Universo; además te estas pintando metafóricamente una diana en la cabeza, para que seas hombre muerto. Si te metes con las personas equivocadas no pagas muy caro. A veces el cerebro te juega malas pasadas. En ciertas ocasiones, algunas personas en las que confías, te demuestran que no son de fiar y te has equivocado con ellos. A veces solo hay una forma de ganar.

Lin Oeding utiliza ciertos planos, para contarte subliminalmente, cierta información sobre el personaje que estás viendo, que descubres más tarde sutilmente y de manera bastante intrigante; hasta que te dice que se trata de tráfico de drogas. También usa los primeros planos, para decirte algo que tendrás que ver, con algo que sucederá más adelante. 




                                                                     Nacho Miret





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