ASESINO DE ABUELAS


Que dios nos perdone es un film con un guión interesante, misterioso, policiaco, oscuro, lúgubre, perturbador e intenso, pero de manera diferente a la habitual. De forma sutil pero clara, concisa, visual y detallada, la introducción te presenta primero a Velarde (Antonio de la Torre) en una situación, supuestamente triste, pero que es más fría que el hielo; después a Alfaro (Roberto Álamo), de la misma manera, pero en otra circunstancia. En la primera era la Tristeza, en la segunda es la Ira. Todo esto lo hace, para que conozcas el comportamiento habitual, carácter, mentalidad, estilo de vida y personalidad de los protagonistas de la historia que están explicando. Cada vez te va quedando más claro, la clase de personas que son Velarde y Alfaro. De golpe y sin previo aviso, descubres que Velarde es tartamudo, que es un genio en lo suyo y que su compañero Alfaro es su traductor, porque sabe lo que quiere y necesita. Poco a poco se va desvelando, que se trata del típico relato siniestro de policías, pero con un pequeño detalle para intentar diferenciarlo de los demás. Más tarde descubres que Velarde y Alfaro son los compañeros perfectos (sarcasmo): uno que no tiene filtros a la hora de hablar, y el otro que no sabe controlar sus impulsos de ira. La situación se pone más intrigante, emocionante e inquietante según transcurre la historia; y las circunstancias se enturbian más por momentos y se ponen cada vez más peliagudas. El guión no tiene ningún tipo de censura; puedes llegar a ver cosas que no te gustan nada, ni que se visualmente atractivas. De forma demasiado evidente te dice cuándo y que chica le gusta a Velarde. A medida que avanza el relato, se ve mejor que Velarde es una persona bastante introvertida y algo maniática. De repente el guión te muestra un suceso impactante, que posiblemente cambiará radicalmente trescientos sesenta grados, el rumbo de la historia. Los momentos de tensión son muy fuertes y marcados. Así sin más, el guión te enseña al asesino y violador de abuelas, en su entorno. Para que comprendas su modo de actuar y una pequeña parte de porque lo hace. También llegas a ver lo sádico que es. De repente ves un trágico incidente, en el que Alfaro se ve involucrado predeciblemente, pero con un desenlace absolutamente inesperado. Cerca del final, hace un salto temporal de tres años hacia delante, para pasar a la parte realmente importante y esperada del relato que te han estado narrando. Es una tragedia oscura en toda regla. Tiene un final feliz, reconciliador, Kharmico, vengativo, justiciero y trepidante, vale la pena la espera.

La interpretación de Roberto Álamo es camaleónica, perfecta, impecable, magnífica, agradecida, auténtica y que ayuda a que todo el engranaje que hace que su personaje se mueva, funcione perfectamente. Las interpretaciones de este tipo, son muy favorables para los guiones, porque ayudan a que el espectador se sumerja de lleno en el relato que te están contando, empatice con todos y cada uno de los que aparecen en la historia que explican, incluyendo el suyo y todo fluya mucho mejor. Es decir, que este nivel interpretativo que tiene Roberto Álamo, es muy necesario en determinadas películas en concreto, porque son las que hacen que el guión funciona mejor, tenga más fuerza y eficacia en el espectador. La de Antonio de la Torre es tan magnífica y auténtica, que ayuda a que todo el engranaje que hace que su personaje se mueva, funcione perfectamente. Las interpretaciones de este tipo, son muy favorables para los guiones, porque ayudan a que el espectador se sumerja de lleno en el relato que te están contando, empatice con todos y cada uno de los que aparecen en la historia que explican, incluyendo el suyo y todo fluya mucho mejor. Es decir, que este nivel interpretativo que tiene Antonio de la Torre, es muy necesario en determinadas películas en concreto, porque son las que hacen que el guión funciona mejor, tenga más fuerza y eficacia en el espectador.

La película te transmite el mensaje de que las casualidades no existen: todo ocurre por un misterioso, curioso, extraño y desconocido motivo en particular. Una infancia dura no resuelta puede llevar graves y serias consecuencias demasiado desagradables. A veces es necesario mucha discreción, para que la gente no sepa las malas noticias y se altere; y así pueda vivir tranquila en la ignorancia. En algunas historias siempre hay algo que no encaja. En algunas ocasiones, no es nada bueno perder los nervios y dejarte llevar por los impulsos, te puede salir muy caro; hay que saber controlarse. En este mundo por desgracia, hay individuos que están muy mal de la cabeza. Te puedes topar con la persona que buscas, de la manera más inesperada posible. En ciertas circunstancias es necesario tomarse la justicia por su propia mano.

Rodrigo Sorogoyen utiliza el plano subjetivo de distintas formas y des de varios sitios (sean persona u objetos). Para que al espectador le sea mucho más fácil conectar con el personaje a nivel personal e íntimo. Usa imágenes auténticas de alborotos, para aportarle más realismo al relato.





                                                                     Nacho Miret







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