MCDONALD'S - CRÍTICA EL FUNDADOR
The Founder es
un film con un guion atractivo, atrapante, sincero, sin filtros, biográfico, es
decir, que ocurrió de verdad, curioso, mercante, personal, esclarecedor,
educativo, retrospectivo y “emprendedor”. La introducción te deja bien claro
que la historia que te van a contar, está basada en hechos reales (aunque ya lo
sepas, por deducción) y después te presenta de forma comercial, laboral,
personal, concisa, tenuemente verdadera y directa a Ray Kroc (Michael Keaton),
para que puedas ver su comportamiento habitual, carácter, personalidad,
mentalidad y estilo de vida. También te deja demasiado claro el tipo de
película que será y cuál es su género dominante. La situación se pone
progresivamente más interesante y emocionante. El guion te muestra el concepto
revolucionario, que tuvieron los hermanos McDonald en el momento justo, que
hizo replantearse todo el funcionamiento de los restaurantes de esa época. Viendo
lo que fue McDonald’s y en lo que se ha convertido actualmente, es más que
evidente que ha perdido bastante en cuanto a calidad. Según avanza el relato,
vas comprendiendo el porqué del descenso en la calidad del producto de
McDonald’s; porque al igual que Microsoft, la idea es robada y, por lo tanto, al
no poder igualarlo, la calidad ha bajado radicalmente. Ciertos detalles del
guion son demasiado predecibles. Las circunstancias se van complicando
exponencialmente a nivel económico (primero para un personaje y luego para
otro). Con la elipsis temporal, ahorra y simplifica tiempo, logrando enseñarte
lo que quiere que veas, sin que resulte pesando, usando pocas imágenes
(solamente las necesarias). Según se va desarrollando la historia, vas viendo
como Ray Kroc, posee el don de la palabra, pero al inicio estaba
desaprovechado, por estar en el lugar incorrecto. A medida que crece el éxito
de Ray Kroc, puedes apreciar claramente, como también lo hace su ego, a la par.
Es obvio que han endulzado un poco la realidad, para que le guste al público. Los
problemas financieros persistentes de Ray Kroc, te hacen empatizar
intermitentemente con él y mantiene vivo el interés. De repente y de manera muy
insinuante y brevemente, descubres el posible nacimiento del Burger King. Te
deja indiscutiblemente claro, que Ray Kroc era un ladrón, cabronazo y
desalmado, entre otras razones por las cuales le robo la idea a unos hermanos que se lo
habían currado con sangre, sudor y lágrimas, dejándolos en la ruina; después le
robo la mujer a un franquiciado. Tiene un final relativamente “feliz”, sincero,
sin filtros, despiadado, cruel, evolutivo, comercial, revelador, que usa
imágenes del discurso, del auténtico Ray Kroc y te explica lo que sucedió, con
los verdaderos protagonistas en la vida real.
La interpretación de Michael
Keaton impecable, agradecida, agradecida, auténtica y que ayuda a que todo el
engranaje que hace que su personaje se mueva, funcione perfectamente. Las
interpretaciones de este tipo, son muy favorables para los guiones, porque
ayudan a que el espectador se sumerja de lleno en el relato que te están
contando, empatice con todos y cada uno de los que aparecen en la historia que
explican, incluyendo el suyo y todo fluya mucho mejor. Es decir, que este nivel
interpretativo que tiene Michael Keaton, es muy necesario en determinadas
películas en concreto, porque son las que hacen que el guión funciona mejor,
tenga más fuerza y eficacia en el espectador.
El film te transmite el
mensaje de que los avisos sirven para darles pequeños toques, sacarte la venda de
los ojos y devolverte a la realidad. El mundo comercial es muy cruel,
traicionero y duro; siempre habrá alguien que quiera adueñarse de tu idea,
aunque sea de un modo fraudulento o rastrero. Existen personas que les cuesta
arrancar y triunfar, pero cuando lo hacen, es a lo grande. Cuando todo va mal,
al recibir una buena noticia, puede llegar a ser tan buena, que te cuesta mucho
creer que sea cierto. A veces simplemente hay que esperar a que la gente se
acostumbre a lo nuevo, y así pueda tener éxito. La combinación perfecta de
personas, formas de pensar, inteligencia y demás, son la clave para el éxito. En
ciertas ocasiones, hemos de tomar decisiones demasiado arriesgadas pero
necesarias. Quien no arriesga no gana, aunque eso implique perderlo todo. Nunca
tires la toalla, debes perseguir siempre tus sueños, cueste lo que cueste. Puedes
tener un don y usarlo, pero si no estás en el sitio adecuado, lo estás
desaprovechando. A los ricos (la gran mayoría), solo les interesa el dinero, en
vez de la calidad y su imagen; mientras tenga ingresos.
John Lee Hancock hace que el actor, mire fijamente a la cámara,
rompiendo la cuarta pared, para que sutilmente parezca que el personaje está
interactuando con el espectador e intentando venderle algo; ensalzando su parte
de vendedor y la propia venta. Ha construido un guion técnico muy sistemático y
esquemático. Utiliza grabaciones de la época, mostrándote las construcciones de
los McDonald’s, para otorgarle el realismo necesario.
Nacho Stars: 7, 57
Nacho Miret
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