PARASITOS SOCIALES - CRÍTICA PARÁSITOS

 

Parasites es un film con un guion “seductor”, atrapante, sincero, directo, curioso, familiar de manera distinta a la habitual, social, económico, insinuante, criminal, esclarecedor y “espabilado”. La introducción te presenta de forma clara, concisa, sincera, personal y directa, a una familia al completo y su situación económica actual; al mismo tiempo ves el comportamiento habitual, carácter, personalidad, mentalidad y estilo de vida de cada uno de los miembros de la familia. Te deja demasiado claro el tipo de película que será y cuál es su género dominante. La situación se pone progresivamente más interesante. Tiene ciertos momentos, en los que una secuencia parece un gag, pero no estás muy seguro, el humor es muy sutil y además parece negro. A medida que se desarrolla la historia, vas descubriendo que Kim Ki-Woo (Woo-sik Choi) y Kim Ki-Jung (So-dam Park) son estafadores muy habilidosos y creativos (enseñaran a sus padres a serlo), que solamente lo hacen por necesidad, poder ganarse la vida y tener dinero para comprar lo esencial para vivir. Tiene un sketch curioso y gracioso, que se extiende durante prácticamente todo el film; la gracia se debe haber como un familiar enchufa al otro y sucesivamente. Según transcurre el relato, entiendes que la película, se llama Parasites, porque habla de los parásitos sociales y económicos. Las circunstancias se van complicando exponencialmente. De pronto, ocurre algo que pondrá todas las cartas sobre la mesa y provocará una especie de enfrentamiento. La intensidad y tensión van creciendo gradualmente (a partir de la mitad de la historia), generando más interés, acelerando el ritmo del relato y causando angustia, para provocar que el espectador se mantenga pegado a la pantalla. A medida que avanza la historia, va siendo más evidente, que el marido de la anterior sirvienta, ha de ser ingresado en un hospital psiquiátrico. Va adquiriendo un tono oscuro, perturbador, inquietante y preocupante, que va siendo más visible según se desarrolla el relato. En ciertas ocasiones parece un film de terror. De repente se revela el desenlace de un suceso trágico que afecta a la familia Kim. Posee un final relativamente reconciliador, apagado, triste, sincero, directo y revelador. 

La interpretación de Kang-ho Song es impecable, magnífica, agradecida, auténtica y que ayuda a que todo el engranaje que hace que su personaje se mueva, funcione perfectamente, porque dice mucho sin decir y hacer casi nada en determinados momentos muy precisos. Las interpretaciones de este tipo, son muy favorables para los guiones, porque ayudan a que el espectador se sumerja de lleno en el relato que te están contando, empatice con todos y cada uno de los que aparecen en la historia que explican, incluyendo el suyo y todo fluya mucho mejor. Es decir, que este nivel interpretativo que tiene Kang-ho Song, es muy necesario en determinadas películas en concreto, porque son las que hacen que el guion funciona mejor, tenga más fuerza y eficacia en el espectador.  

El film te transmite el mensaje de que a veces la vida te da ciertas oportunidades, aparte de por tu conocimiento, simplemente por ser como eres (educación, respeto, etc.) Existen personas, a las que se les da realmente bien vender cualquier cosa, mintiendo y usándola labia que tienen. Cuando trazas un pequeño plan, la astucia lo es todo; es fundamental para que funcione. Para vencer a un rival duro, hay que conocerlo bien y a fondo; sabiendo detalles que poca gente sepa. La verdad tarde o temprano acaba saliendo a la luz. Todos tenemos secretos, algunos peores que los de otros. Algunos individuos mienten más que hablan. La vida te da oportunidades únicas para poder solucionar los problemas que hayan surgido; pero hay que actuar rápido y saberlas ver. Las cosas se pueden torcer drásticamente. 

Bong Joon Ho utiliza la panorámica vertical, para suavizar al máximo la entrada al mundo de los personajes.  Con ciertos planos, le da un cierto atractivo estético a la película. Aprovechando el agua logra una transición entre cambio de secuencias, absolutamente perfecta, suave y casi imperceptible. Con el plano subjetivo, te mete en la piel del personaje (es para lo que sirve este plano).

Nacho Stars: 7,20

Nacho Miret