VENGANZA, POLÍTICA Y TERRORISMO
The Foreigner
es un film con un guión interesante, vengativo, lúgubre, político, militar,
dramático y criminal, al estilo anarquista. La introducción te presenta a Quan
Ngoc Minh (Jackie Chan) de tal forma que veas claramente, su comportamiento
natural, carácter, personalidad, mentalidad y estilo de vida; al mismo tiempo
que conoces a su hija Fan (Katie Leung), para que así luego, cuando ves el
acontecimiento terrorista, comprendas mucho mejor sus actos y el porqué.
También te dice el tipo de película que será y cuál es su género. Cuando ves a
los terroristas, te sorprenden e impactan un poco, porque no lo parecen; tienen
un look y estilo de vida absolutamente diferente, al que te esperabas, debido a
la manera de la que te los han vendido al principio. De forma muy evidente, te
deja bien claro, cuál es la principal preocupación del Gobierno Irlandés; y no
son las víctimas de los atentados terroristas. De manera extremadamente
transparentes, ves cuáles son las intenciones de Quan Ngoc Minh tras presenciar
la muerte de su hija. Cuando oyes a Quan Ngoc Minh explicarle su vida al
policía británico, descubres que está llena de muerte, desgracias, soledad y
tristezas, allá por donde miras; diciéndote sin rodeos que está absolutamente
solo (no tiene a nadie, en cuanto a familia se trata). Es una forma un tanto
peculiar pero eficaz, de intentar hacer que el espectador empatice con él. De
manera inesperada, el guión te cuenta que Quan Ngoc Minh tiene conocimiento
avanzados y mucha experiencia en temas militares, de defensa y poco más se
puede decir; lo cual plantea varias hipótesis razonables sobre su pasado. Ciertos
detalles de guión son demasiado predecibles. Tiene una enorme parte política,
con una pizca de corrupción; es decir, que te enseña en dosis medianas, la
parte oscura de la política. La situación se pone cada vez más emocionante y
trepidante efectivamente en pocos segundos. Poco a poco vas viendo lo
profesional y manitas que es Quan Ngoc Minh. Mediante el flashback, conoces los
detalles importantes del pasado de Quan Ngoc Minh. De repente el guión te
revela una información sobre Liam Hennessy (Pierce Brosnan), que era un poco
previsible, pero igualmente resulta impactante. De golpe con los personajes, se
le da la vuelta a la tortilla. Como era de esperar, en todos los films en los
que aparece Jackie Chan, se puede apreciar, además de que no puede faltar la
clásica lucha con los característicos movimientos de Jackie Chan. Tiene un
final feliz, reconciliador, familiar, amistoso, sincero y en paz.
La interpretación de
Pierce Brosnan es impecable, magnífica, intensa, auténtica y que ayuda a que
todo el engranaje que hace que su personaje se mueva, funcione perfectamente.
Las interpretaciones de este tipo, son muy favorables para los guiones, porque
ayudan a que el espectador se sumerja de lleno en el relato que te están
contando, empatice con todos y cada uno de los que aparecen en la historia que
explican, incluyendo el suyo y todo fluya mucho mejor. Es decir, que este nivel
interpretativo que tiene Pierce Brosnan, es muy necesario en determinadas
películas en concreto, porque son las que hacen que el guión funciona mejor,
tenga más fuerza y eficacia en el espectador.
La película te transmite
el mensaje de que el Kharma existe: recoges lo que siembras; el Kharma castiga
y el Dharma recompensa. La venganza puede ser muy dulce. Algunas personas te
pueden dar gratas sorpresas. Nunca subestimes a tu enemigo, es de lo peor que
se puede hacer. Las apariencias engañan: un puede parecer una mosquita muerta y
ser totalmente lo contrario. A veces es necesario tomarse la justicia de tu
propia mano. Ciertas personas llevan unas vidas muy lúgubres y solitarias. Los
problemas no se pueden ignorar. La violencia en el noventa por ciento de los
casos, solo genera más violencia. Todo el mundo tiene secretos: algunos peores
que otros. Hay corrupción en todas partes, incluso en las más altas y
protegidas del Gobierno; es un virus que se extiende como la peste. Por
desgracia en el mundo existen individuos que son, unos completos capullos,
groseros, irrespetuosos y que se creen que el mundo es suyo por derecho
natural. Siempre hay alguien radicalistas y/o anarquista, que no está de
acuerdo y decide ponerle fin de una forma completamente equivoca, peligrosa e
ilegal.
Martin Campbell utiliza los planos cerrados, para decirle al público,
cuando debe centrarse en algo y la importancia que tiene.
Nacho Miret
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