SUPERVIVIENTES
IO es un film con un
guión curioso, interesante, atrapante, misterioso pero de forma diferente a la
habitual, postapocalíptico, artístico y científico. Mediante la voz en off de
Sam (Margaret Qually), la introducción te cuenta un acontecimiento a escala
mundial, para presentarte una situación, entiendas de que va ir la historia que
te van a contar, el género dominante de la película y te metas de lleno en la
trama principal del guión. De forma muy clara, visual y evidente, te explica
que este relato, está situado en un mundo postapocalíptico, del cual todos los
seres humanos han huido a buscar un nuevo planeta en el que vivir y solo quedan
unos pocos supervivientes en la Tierra. Una voz en off masculina que está
leyendo un e-mail, plantea una duda que despierta mucha intriga, hasta ahora
solamente hemos visto a un solo personaje superviviente en el Planeta Tierra,
pero la voz en off dice: “tendréis”; así que hay alguien más en la Tierra
viviendo con la protagonista (aparte de Micah (Anthony Mackie)) sobreviviendo?.
Hay que dejar que la historia avance, para saber si la pregunta obtiene
respuesta o no. Más tarde dicha pregunta al fin obtiene una respuesta, revela
que es una carencia de información del personaje masculino que solo conocemos
por la voz en off que lee los e-mails. De repente, el guión mete a un segundo
personaje superviviente en la Tierra: Micah: un hombre que parece tener los
mismo conocimientos o parecidos que Sam. Tiene varias partes filosóficas y
otras en las que habla sobre el arte, de una manera muy elegante y tradicional.
Poco a poco vas descubriendo, que Sam es un genio, que el tema que domina es la
ciencia y le interesa el arte. A través del flashback que se acaba convirtiendo
en una especie de ensoñación, te cuenta una parte importante de la historia. La
situación se pone cada vez más cautivadora e intrigante. Ciertos detalles del
guión son demasiado predecibles. Según va avanzando el relato, las
circunstancias se van complicando un poco. Tiene la cantidad justa de drama. Posee
un final demasiado misterioso, que despierta muchas dudas, filosófico,
reconciliador, peculiar, sincero y en cierta forma previsible.
La interpretación de
Anthony Mackie es impecable, sincera, interna, auténtica y que ayuda a que todo
el engranaje que hace que su personaje se mueva, funcione perfectamente. Las
interpretaciones de este tipo, son muy favorables para los guiones, porque
ayudan a que el espectador se sumerja de lleno en el relato que te están
contando, empatice con todos y cada uno de los que aparecen en la historia que
explican, incluyendo el suyo y todo fluya mucho mejor. Es decir, que este nivel
interpretativo que tiene Anthony Mackie, es muy necesario en determinadas
películas en concreto, porque son las que hacen que el guión funciona mejor,
tenga más fuerza y eficacia en el espectador.
El film te transmite el
mensaje de que todo el mundo tiene secretos. A veces en la vida hay que tomar
decisiones difíciles y duras de elegir. El roce hace el cariño. La vida está
llena de sorpresas, igual que algunas personas. Las apariencias engañan, una
persona puede parecer una cosa y ser otra muy diferente. La verdad tarde o
temprano, siempre acaba saliendo a la luz, si es necesario. El amor es una de
las energías más fuertes, poderosas, valiosas, importantes y preciosas de todo
el Universo entero. Acostumbra a pasar, que la gente nunca escucha a los
expertos, porque a veces, aunque sea una realidad, es tan impensable y cuesta
tanto de creerlo, que no queremos oírlo.
Jonathan Helpert utiliza la cámara en mano, para entre otras cosas hacer
un travelling circular, de manera dudosa y temblorosa, porque debido al
movimiento causado por el operador de cámara, se ve la cámara; algo que no
debería ocurrir nunca.
Nacho Miret
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