DOS POLICÍAS MUY CONOCIDOS

 Bad Boys Ride or Die es una película homenaje a las anteriores entregas de Bad Boys, la típica comercial, para recaudar dinero y sacar más entregas de un film que gustó mucho; es perfecta para los fans. Ciertos detalles son tan predecibles que aciertas más o menos, el noventa por cierto de los sucesos y los culpables implicados en los crímenes. Ralentizando la imagen, logra hacer que un acontecimiento se magnifica, con lo cual resulte más épico. El nivel cómico que queda en la superficie, es divertida pero no te hace soltar carcajadas; únicamente te ríes internamente. Posee un cameo del famoso Influencer de tik tok e instagram Khaby lame y otro del conocidísimo DJ Khaled. Las secuencias de acción al más puro estilo Bad Boys, funcionan, porque consiguen generar la suficiente adrenalina, para provocarte pequeños subidones de adrenalina, si eres de los que viven las películas. Al igual que el propio guión, que pese a estar dominado por un ritmo lento, al final consigue atraparte e implicarte en la historia que te están contando. El guión está dotado de recursos de guión con efecto tardío. Como la tozudez de Judy (Rhea Seehorn), que llega a sacarte de quicio. La parte más potente y efectiva de todo el guión es el clímax, como manda la tradición, pero también dice mucho del film. Tiene una secuencia post-créditos, que hace referencia a un chiste que se ha contado anteriormente. Parece una película hecha por los fans. Es del mismo estilo que Beverly Hills Cop: Axel F, salvo que en está ocasión las secuencias de acción son más trepidantes. Si te gusta Bad Boys, te encantara, pero si no te gustan las películas que rememoran las anteriores entregas, entonces busca otro film.

La interpretación de Eric Dane se queda atrás cuando interpretaba al Dr. Mark Sloan en Grey’s Anatomy. Además, que ciertos detalles de su interpretación refuerzan lo recién mencionado, como gestos que le sacan del personaje, o elección que le hacen quedar como lo opuesto a lo que representa su personalidad. En cambio, la de Will Smith es peculiar y relativa, ya que demuestra lo buen actor que es, y que hace un papelón, lo hace excelente, pero podría hacerlo muchísimo mejor. En parte no es culpa suya sino de los directores, que no han sabido darle todas las herramientas necesarias, para mejorar su interpretación aún más; cincuenta por ciento actor, cincuenta por ciento director.

Adil El Arbi y Bilall Fallah han construido un guión técnico demasiado sistemático, sin romper ninguna pauta prestablecida, salvo por la steady cam a modo de plano subjetivo de la pistola, que aparece al final; es lo único llamativo, que logra captar visualmente la atención del espectador. Con la cámara lenta, hace la situación más épica. La dirección de actores es acertada, pero mucho más mejorable, por lo mencionada en la interpretación, anteriormente.  

Nacho Stars: 5,42

Nacho Miret