INSECTOS MUTANTES Y ROMANCES - CRÍTICA DE AMOR Y MONSTRUOS


 Love and Monsters es una película postapocalíptica cómica, pero cambiando los zombies por insectos y anfibios mutantes gigantes. El guion está tan bien estructurado y ejecutado, con una narrativa interesante, simbiótica y perfectamente realizada, que logra hacerte partícipe de la aventura que viven los personajes, siendo un superviviente más en el apocalipsis de insectos y anfibios mutantes. Quieras o no, te involucras emocionalmente con el relato, provocando que cuando suceden eventos desagradables, sientes la necesidad de avanzar la película; pero eso, simplemente es que los recursos empleados para construir el guion están haciendo efecto y cumpliendo su función, haciendo al mismo tiempo, que la película sea más inmersiva. Es una Road Movie en toda regla (un film donde el personaje protagonista emprende un viaje, normalmente a pie, y a la par va haciendo un viaje interno, que es la evolución del personaje, que se desarrolla a la misma velocidad que el protagonista hace su viaje, hasta que llega a su destino, donde su crecimiento personal concluye, vemos toda su evolución, y el cambio que hizo, en comparación de cuando empezó el viaje). Te muestra toda la aventura desde el punto de vista de Joel (Dylan O'Brien), el verdadero protagonista de esta historia. Mediante los flashbacks, que te explican detalles del pasado de Joel, logran que empatices mucho más con él y te sientas como si fuera alguien muy cercano a ti. A nivel cómico, posee unos chistes efectivos, divertidos e internamente graciosos, que podrían hacer un poco más de gracia, para soltarte alguna carcajada, pero son igualmente funcionales y divertidos debido a su simpleza; y no podemos pretender que todas las comedias te suelten una carcajada (es más fácil hacer llorar que reír). Consigue jugar contigo, haciéndote creer que los detalles que crees que son predecibles, los aciertes, pero luego te demuestra que estabas equivocado; el único previsible está indiscutiblemente justificado (el enfrentamiento, contra unos antagonistas). Por el género que es, y la época, cumple su función de manera eficazmente y sencillo. Todo está planeado estratégicamente para hacerte empatizar con Joel. Chico (el perro), Clyde (Michael Rooker) y Minnow (Ariana Greenblatt) son personaje, que ayudan a la evolución de Joel y que la trama avance. Si eres de los que vive los films, te va a causar algún que otro pequeño subidón de adrenalina. Es un guion tan personal e intenso, que logras sumergirte por completo en la aventura, incluso inconscientemente. Si te gustan las películas postapocalípticas, que recuerdan al videojuego The Last of Us, no te puedes perder Love and Monsters.

La interpretación de Dylan O'Brien es perfecta, mimetizante, equilibrante e íntima, lo que desemboca en una inmersión aún más profunda en su personaje y el relato, reforzando, el recurso del guion de convertir al espectador en un superviviente más de este peculiar apocalipsis. Al contrario de lo que opina mucha gente, los perros también pueden actuar, y chico, no se queda atrás, refuerza el personaje de Joel, exterioriza sus miedos, avisos y decisiones que debería tomar, además de también sufrir por él (en ningún momento del film, le ocurre nada malo, es un perro extremadamente inteligente, así que los amantes de los animales podéis estar tranquilos). La interpretación de Michael Rooker y Ariana Greenblatt están focalizadas y unificadas con la de Dylan O'Brien, ya que le impulsan y hacen evolucionar.

Michael Matthews ha conseguido un excelente tratamiento y ejecución del guion al convertirlo en imágenes, con una elección de planos, aunque esquemática, totalmente acertada. La dirección de actores es absolutamente fusionada y mimetizante, a la vez que potente, por lo que ayuda al espectador a entrar en la aventura, generando el suficiente interés.    




Nacho Stars: 7,58




Nacho Miret  




        

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