DESAPARICIÓN MUDA - CRÍTICA MUTE

Mute es un film con un guion futurista, interesante, atrapante, camuflado, encubierto, curioso, pasional, criminal, lúgubre, inquietante, creepy, callejero, sincero, directo, esclarecedor, moralista, callejero, típico, visual, enrevesada y detectivesco. La introducción te presenta a Leo (Alexander Skarsgård) cuando es un niño para mostrarte el accidente, que causó que se quedará mudo para siempre. A continuación, hace un salto temporal hacia delante de treinta años, para que veas los progresos en su vida, comportamiento habitual, carácter, personalidad, mentalidad y estilo de vida. También te deja demasiado claro el tipo de película que es y cuál es su género dominante. El guion se apoya bastante en la imagen, para transmitirte el mensaje necesario; globalmente para ayudarte a entender mejor a Leo, y con el trasfondo de emular su lenguaje (a un nivel sutil). La situación se va poniendo progresivamente más atrayente, oscura, envuelta, intrigante y emocionante. Ciertos detalles del guion son demasiado predecibles. Las circunstancias se van complicando exponencialmente. Es más evidente, que Maksim (Gilbert Owuor), es un jefe mafioso que dirige una discoteca; porque es un personaje completamente transparente, cumple con todos los estereotipos de un mafioso. Tiene constantes giros, pero de un modo diferente al habitual y más camuflados, para intentar engañarte, jugar contigo e intentar el nivel de la categoría del film. Está repleto de clichés muy usados. De manera inesperada, Sam Rockwell hace un cameo en esta historia: durante un programa de televisión, donde todos los personajes son clones de Sam Rockwell. El hecho de que Naadirah (Seyneb Saleh) desaparezca repentinamente, está pensado minuciosa y expresamente para dos cosas: 1- demostrar que los problemas que tiene son graves de verdad, y 2- Un recurso que sirve para crear un misterio que otorgue intriga al guion y despierte la curiosidad en ti. La resolución de la desaparición de Naadirah es triste, romántica, pasional y espeluznante. Es un drama oscuro con final feliz en toda regla. Mediante el flashback, te enseña cosas que Leo recuerda, y que tienen que ver con Naadirah. Según se va desarrollando el relato, empiezas a sospechar, que Leo y Cactus Bill (Paul Rudd) plausiblemente acaben colaborando juntos o algo por el estilo; debido a que sus caminos no paran de cruzarse. Más tarde, cuando se desvela toda la verdad sobre la desaparición de Naadirah, resulta sorprendente e impactante, se revela que Cactus Bill no colaborara con Leo, sino, todo lo contrario, está implicado al cien por cien en la trama. Ciertos personajes hacen algunos determinados actos misteriosos, que generan bastante sospechas e intriga. A medida que va avanzando el relato, vas descubriendo más detalles sobre Naadirah, por ejemplo, que tenía una doble vida. El misterio de la desaparición de Naadirah, posee el efecto bola de nieve, es decir, que cada vez que avanza, se hace más grande. Pronto se confirma la sospecha de que tenías sobre Pato (Justin Theroux): es un pederasta. Es de esas películas que has de esperar hasta el final del todo, debido al suspense y a las vueltas que te hacen dar. Tiene un final feliz, reconciliador, vengativo, justiciero, que te hace esperar, Kharmico, oculto, veraz, sin filtros, aleccionador, revelador, prospero, evolutivo, curioso, oscuro, perturbador, prometedor y esperanzador.      

La interpretación de Alexander Skarsgård y Paul Rudd es correcta, creíble, agradecida, verdadera y que ayuda a que todo el engranaje que hace que su personaje se mueva, funcione perfectamente. Las interpretaciones de este tipo, son muy favorables para los guiones, porque ayudan a que el espectador se sumerja de lleno en el relato que te están contando, empatice con todos y cada uno de los que aparecen en la historia que explican, incluyendo el suyo y todo fluya mucho mejor. Es decir, que este nivel interpretativo que tienen Alexander Skarsgård y Paul Rudd, es muy necesario en determinadas películas en concreto, porque son las que hacen que el guión funciona mejor, tenga más fuerza y eficacia en el espectador.

El film te transmite el mensaje el Kharma existe: tarde o temprano recoges lo que siembras; el Kharma castiga y el Dharma recompensa. Te puedes acabar haciendo amigo de quien menos te esperas, de la manera más inesperada. Todos tenemos secretos, algunos peores que los de otros. La verdad tarde o temprano acaba saliendo a la luz, si es necesario lo hará. El amor mueve montañas, si la pierdes, se pierde la ilusión y belleza de vivir y la magia. Nunca te metas con la persona equivocada, te estarás pintando una diana en la cabeza y sería lo último que hagas; hay cosas que para un hombre son sagradas, si se lo tocas estás muerto. A veces las cosas se tuercen demasiado y de golpe, en determinadas ocasiones provocadas por una acción tuya. La vida te da muchas sorpresas. Siempre han existido los negocios clandestinos; pensado para la gente que no se puede permitir un legal y oficial, diversas razones. En determinadas ocasiones no hace falta hablar, vale más una imagen que mil palabras. Perro ladrador poco mordedor: hay individuos que siempre buscan pelea, pero a la hora de la verdad son unos auténticos cobardes. Hay individuos, que son unos verdaderos gilipollas integrales irrespetuosos.   

Duncan Jones ha construido un guion técnico bastante sistemático, esquemático y tradicional. La proporción, simetría y continuidad de algunos planos subjetivos, está muy mal hecha, se nota demasiado y te saca del relato. Con: el efecto de clonación, reduce el tiempo de una tarea eterna en pocos minutos; el planco subjetivo te mete en la piel del personaje e intentar agobiarte como lo está él pero fracasa y sigues estando impasible; la transición a lo western (utilizando una quemadura de cigarro) censura la tortura; la cámara ultra rápida, hace que veinticuatro horas sean unos pocos segundos, al parecer Duncan Jones, odia el tiempo supuestamente muerto e inutil, según él.

Nacho Stars: 7,4 

 

Nacho Miret