VIVIR Y SENTIR LA VIDA - CRÍTICA THE GIVER: EL DADOR DE RECUERDOS

The Giver es un film con un guion seductor, atrapante, curioso, misterioso, educativo, moralista, penetrante, aventurero, sectario, explorador, de conocimiento, veraz, sin filtro, futurista, esclarecedor, poco a poco, “postapocalíptico”, y enmascarador. La introducción te presenta de forma personal, sincera, directa, sectaria y con su voz en off a Jonas (Brenton Thwaites), que al mismo tiempo te explica, hablando directamente contigo, la situación “postapocalíptica” que vive junto a otras personas. También para que puedas ver, oir e intuir su: comportamiento habitual, carácter, personalidad, mentalidad y estilo de vida. También te deja demasiado claro el tipo de película que será y cuál es su género dominante. Usan el blanco y negro, y el color, para separar la normalidad de la diferencia. La voz en off en off de Jonas, te habla desde acontecimientos futuros, es decir, te avisa de que algo muy grave que sucederá. La situación se va poniendo progresivamente más interesante, intrigante y emocionante. A medida que se va desarrollando el relato, vas descubriendo que la nueva sociedad que han construido los ancianos, pero en concreto la Presidenta (Meryl Streep), en realidad y de una manera muy sutil, es muy exclusión y clasicista de forma diferente. El hecho de que todo esté en blanco y negro, te hace apreciar mucho más el color cuando aparece. El guion se encarga personalmente de hacer que goces y aprecies, cada sentido, sensación y emoción: vista. Oído, amor, alegría, etc. Ciertos detalles del guion son demasiado predecibles. Es más que evidente que el dador de recuerdos (Jeff Bridges), trama algo en secreto, contra la comunidad, para liberarlos, pero intentando no hacer demasiado daño. Según va transcurriéndola historia, se va desvelando con más fuerza que la presidenta, en verdad, es la antagonista y la comunidad su secta. De repente el guion te revela toda la verdad y descubres que la presidente realmente es una supremacista, líder de una secta, que predica con el asesinato, oculto a plena vista y fingiendo que es algo bueno, camuflado en una liberación que te lleva más lejos de la frontera (algo demasiado parecido al gobierno nazi). Las circunstancias se van complicando exponencialmente. Te muestra lo cruel y destructivo que puede llegar a ser, el ser humano. Enseña lo bueno y lo malo de la vida; a modo de balanza, de manera equilibrada, para que así puedas ver toda la verdad del Planeta Tierra y sus habitantes. Algunas partes del guion son demasiado duras e intensas. Poco a poco, la situación empieza a ser más trepidante y a generar pequeños pero potentes subidones de adrenalina en determinadas personas. Posee una parte moralista, que a nivel de enseñanza va creciendo gradualmente. Tiene un final feliz, reconciliador, sutilmente abierto, sincero, directo, prospero, evolutivo, prometedor, esperanzador, revelador y transformador.          

La interpretación de Brenton Thwaites es correcta, creíble, agradecida, verdadera y que ayuda a que todo el engranaje que hace que su personaje se mueva, funcione perfectamente. Las interpretaciones de este tipo, son muy favorables para los guiones, porque ayudan a que el espectador se sumerja de lleno en el relato que te están contando, empatice con todos y cada uno de los que aparecen en la historia que explican, incluyendo el suyo y todo fluya mucho mejor. Es decir, que este nivel interpretativo que tiene Brenton Thwaites, es muy necesario en determinadas películas en concreto, porque son las que hacen que el guion funciona mejor, tenga más fuerza y eficacia en el espectador. Ser destructivo, está en la naturaleza del ser humano.

Ser diferente no es malo, al contrario, es precioso y necesario; la novedad se halla en la diferencia. El aislamiento tarde o temprano acaba provocando algunos tipos de problemas. Las emociones son lo que te hacen vivir y disfrutar, con plenitud, de la vida. Hay un mundo entero, delante de ti, lleno de vida y placeres muy variados (también de todas las clases), y está en tu mano saber verlos y disfrutarlos. Algunas normas están para saltárselas, para poder ser libre. A veces es necesario mentir para proteger una causa mayor. Existen personas que te pueden ayudar a ver la verdad absoluta. La igualdad no es algo tangible, ni físico, ni cuantificable, es algo que se lleva dentro y se debe dejar salir (es como la energía). Hay que tener fe, porque mueve montañas. Existen experiencias únicas, que te harán ver la vida con otros ojos y evolucionar como persona. Las emociones no se pueden reprimir, tarde o temprano, acabarán saliendo a la luz. En ciertas ocasiones, solamente hace falta una persona para cambiar el mundo para mejor. La verdad en algún momento u otro acaba saliendo a la luz, si es necesario e importante lo hará. Siempre han existido los: falsos líderes, profetas, etc. Algunos individuos mienten más que hablan.     

Phillip Noyce utiliza el plano subjetivo, para hacerte sumergir más en la historia y meterte dentro de la cabeza del personaje que estás viendo en ese preciso instante. Ha construido un guion técnico bastante sistemático, esquemático y convencional.

 

Nacho Stars: 6 

 
 
Nacho Miret
 
 
 

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