UN GUION DE MAREO

Este es un film que intenta burlarse de las películas de espías y agentes secretos, haciendo que el género predominante sea la parodia; ya que un espía finge ser algo que no es y un agente secreto des del primer momento sabes que lo es. Esta es otra prueba de la mala traducción de algunos títulos de películas y que la traducción en algunas ocasiones no tiene nada que ver con el titulo original; esta película se llama Central Intelligence así que el titulo correcto debería ser Central de Inteligencia no Un espía y medio. Si vas a cambiar el titulo para inventarte tu uno dirige tú el film y entonces podrás ponerle el título que te dé la gana, pero mientras tanto pon el titulo original o tradúcelo bien.

Hay una decisión cuestionable en cuanto a la interpretación: con tanto movimiento de brazos y corporal de Bob Stone (Dwayne Johnson) parece que el personaje sea rapero en vez de un chico traumatizado y perseguido por su pasado y un incidente que le marcara para toda su vida, convirtiéndole en un niño grande y cachas jugando a ser espía, eso descoloca un poco; haciendo que sea un fallo del actor por querer dar más, como dicen en el mundo del tatuaje “a veces menos es más”.

 El guion es bastante confuso porque va cambiando de malo todo el tiempo provocando que te marees. Parece que Rawson Marshall Thurber no tuviera claro a quien culpar o que intentara emular tanto a las películas de espías des del punto cómico que lo ha sobrecargado de misterio; afectando al personaje de Dwayne Johnson, que se ve que oculta un oscuro secreto, pero no es el de que trabaja para la CIA; después resulta que esto solo es un efecto causado por la confusión del guion. Lo mismo que sucedió los primeros 35 min de Goosebumps que convirtieron a un personaje bueno en uno malo por la confusión del guion. Pero han sabido captar a la perfección la esencia de una víctima del bullying y su proceso de crecimiento como persona, curación de las heridas del pasado y enfrentarte a los problemas cara a cara. Aunque muchas personas crean lo contrario el director interviene más de lo que uno piensa en el guion, ya que puede modificarlo a su antojo; a veces esas modificaciones pueden crear una obra maestra como Focus (Glenn Ficarra y John Requa) o provocar un auténtico desastre como Batman v Superman: Dawn of Justice (Zack Snyder).

Pese a las decisiones cuestionables tomadas por Rawson Marshall Thurber deja claro que es una parodia y que te reirás seguro, porque usa tantos recursos que quieras o no por algún motivo u otro te acabaras riendo, aunque sea una pequeña risa.

                                                                                   Nacho Miret Vives